El ComeGalletas

Todos saben donde está

Porque está en cualquier lugar

El fantástico lugar...

-Plaza Sésamo

Cuando yo era muy pequeñito, mi mama me prendía la televisión y me ponía a ver un programa llamado “Plaza Sésamo”. Pero yo tenía mucho miedo, por que ahí salía una horripilante criatura peluda y azul de ojos saltones y locos, el ComeGalletas. Yo le reclamaba a mi madre para que les dijera a los dueños de la televisión que atraparan a ese monstruo, por que si no se terminaría comiendo a algún niño. Pero mi mami me decía: “No te preocupes, lo que pasa en la televisión no es real, es tan solo una imagen, un cuento, una ficción.” Pero yo sabia que mi mama me mentía y en realidad quería que el ComeGalletas me comiera. Así es que decidí ir a buscarlo para terminar con su existencia, antes de que el me comiera a mi. A la media noche, me levante y prendí la televisión, y aunque lo busque y busque en todos los canales, no lo encontré, parecía estarse escondiendo. Finalmente encontré un canal donde no había nada, mas que unas barras de colores y supe inmediatamente que esa era la barrera que el ComeGalletas puso para que no lo pudiera encontrar. Entonces intente meter mi cabeza en medio de las barras, para atravesar al otro lado de la tele, pero era una barrera muy dura, así es que camine hacia atrás, cargue y corrí hacia la tele y choque mi cabeza contra la barrera de colores y PUM! Todo se pone negro y de pronto empiezo a ver estrellas a mí alrededor y me doy cuenta de que he logrado entrar al bizarro mundo de Plaza Sésamo, al Videodromo. Observe todo tipo de mutantes: un pájaro gigante, un monstruo en un basurero, un vampiro que cuenta números y en medio de todos ellos, el ComeGalletas. Ahí estaba, con su voz excéntrica, haciendo algún estilo de rezo, dirigiéndose a todos los monstruos, estaba dando un discurso que decía más o menos así:

"Estimados mutantes. Estamos aquí reunidos para consagrar el ritual de la galleta cósmica mutante. Como creación primigenia, masa amorfa y primera substancia que simboliza la radioactividad condensada, forjada por el caos y la destrucción creativa. La consunción del sacramento, abrirá las puertas de la percepción hacia un juego ancestral incrustado en las profundidades de nuestra deformada psique, permitiéndonos la mutación de los sentidos y llevándonos a una plataforma narrativa en donde la información recibida penetrara en los laberintos cerebrales, modificando nuestras ideas, jugando con nuestros archivos y cometiendo altos actos de mutación re-evolucionaría. Espero que esto los llene de inspiración espectral y disfruten de un sublime estado de Bella Locura. Amen."

Y en eso, el ComeGalletas levanta una galleta muy extraña, le da un pequeño mordisco, y luego se la pasa a alguien mas, que a su vez le da otro mordisco y le da la galleta a otro mutante. De pronto sentí que alguien me tocaba la espalda, y al voltear, me encontré al ComeGalletas mirándome con sus ojos locos y ofreciéndome la galleta. Me puse sumamente nervioso, sabia que o me comía la galleta, o el ComeGalletas me comía… Así es que decidí salvar mi propia alma y comer de la Galleta Cósmica Mutante.

Inmediatamente sentí como una explosión en mi mente, una licuadora cerebral, distorsionando toda mi percepción de la realidad. Sentía como una inmensa nube verde y radioactiva me destruía y me reconstruía, me disolvía y me revolvía. Y entonces fue cuando recordé que en realidad yo siempre he sido un mutante de esos que viven en el país de Plaza Sésamo, y entonces descubrí que mi mama estaba equivocada, ella cree que el mundo detrás de la televisión, el mundo de cuentos y ficciones no es real, pero ahora se que es totalmente al revés, nos encontramos en un mundo invertido, vivimos detrás del espejo sin saber que nosotros somos la ficción y aquello es la realidad… Ahora se que el ComeGalletas es una entidad real y es un sacerdote de una religión de mutantes que esperan la apertura de las puertas de la percepción, para que el humano despierte y se de cuenta de que el reino de Plaza Sésamo es un mundo real y superior al mundo de ficción en el que los humanos viven. Desde ese entonces me he convertido en un fiel devoto de aquella religión de mutantes y vengo a pregonar la palabra de nuestro señor el ComeGalletas.

¿Quieres una Galleta?

Ven a jugar

Ven a cantar
Sí!-Plaza Sésamo